La criatura corrompida y alimentada por la ley del más fuerte.
Creación del Humano para subyugar al Humano y desafiar al Señor Oscuro.
Un ejército artesanal, a mano alzada, devorándolo todo.
Antinatural. Incansable. Implacable. Absoluto.
Una pincelada de hogueras y cielos negros, con un acento de crueldad.
Lejos de ser una criatura, el Uruk-Hai es una creación de la tiranía.
De facciones retorcidas y dimensiones descomunales.
Portador de la enfermedad, el desprecio y la destrucción,
inmune a todo, hasta su muerte en batalla.
No hay glorias ni celebración en los campamentos Orcos.
Pues no hay disfrute, cultura ni vida capaz de florecer.
Sólo campos de sal y ceniza; pantanos de sangre y huesos rotos.
Tal era el deseo del Señor Oscuro, y el objetivo de sus Torres, Alfiles y Peones.
No hay mayor poder que aquel que busca aniquilar toda oposición.
Incluyendo la naturaleza.
Tal era la ambición de Saruman el Blanco, quien se puso manos a la obra,
y destruyendo árboles y verde alimentó las fraguas de su invención,
y para quien Howard Shore hizo doblar los tambores.
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