De la misma forma en la que la propaganda totalitaria busca crear un relato en torno a su líder (Fidel Castro en Cuba, Stalin en Rusia, Hitler en Alemania, Perón en Argentina, Mao en China), la propaganda se ha ido apropiando de vocablos y expresiones. De la mano de los avances tecnológicos y de la urgencia de comunicarse -haya o no una necesidad- se han visto hábiles intentos de la ideología acéfala de turno de reescribir, deformar o desvirtuar ciertos conceptos y elementos inherentes a la comunicación escrita, en pos de reducir las sutilezas de los intercambios informativos interpersonales a una serie de emoticones, memes, frases hechas o gifs que sinteticen un sentir o idea dada para que el resto del grupo lo comprenda. Tal vez el más evidente en nuestra región en estos últimos diez años haya sido el "lenguaje inclusivo", una artimaña de pusilánimes enarbolada bajo la aseveración de que a nuest...
Hatajo de Textos, Atajos de Ideas