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Sacando la Cabeza del Agujero de la Complacencia

[Originalmente escrito el 24/07/2022]

 

Tengo tantas ideas como defectos.
Tengo tantos proyectos como obsesiones.

Aún así estoy "solicitando permiso" para hacer lo que deseo.
Permiso a mis amigos para que me visiten.
Permiso a mis clientes para hacer bien un trabajo.
Permiso a mis vicios para enfocarme en lo valioso y lo importante.
Permiso a mi zona de confort a estancar el crecimiento.
Permiso a mis adicciones para salir de mi casa y ver el mundo.


   "Ya no más" suena tan poderoso y terminante. 
   Y tan propio de algo que yo diría, para después relegarlo a todas esas cosas que he dicho... promesas a largos plazos con las que me he llenado la boca; 
esperanzas falsas creadas en otros.

   Soy consciente de muchas cosas, 
principalmente de mi pereza y falta de iniciativa,
constantemente buscando alguien que me valide, en lugar de 
usar mis propios parámetros -probados en el tiempo, cimentados
por la experiencia- como medida de éxito. 
 
   Así como soy consciente de que me gusta competir; 
probarme a mí mismo frente a la audiencia y demostrar mi potencial. 
Admito mi cobardía, así como admito mi temperamentalidad.

   Soy ésto que está acá: un adolescente jugando a ser adulto desde que era pequeño.
   Un Golden Boy venido abajo a fuerza de vaya a saber cuántas dinámicas fallidas y traumas olvidados.
   Alguien con infinito potencial que jamás le puso todo lo que tenía a sus últimos trabajos.
   Alguien ansioso de encontrar clientela permanente o compañeros artísticos para todo el viaje de los que me escondo ante la imposibilidad de ganarme su confianza.

Siento un cansancio; en la vista, en los huesos, tal vez en la mente.
Sé que estoy sobreestimulado.
Sé que nada de ésto hubiese sido escrito si no se hubiera cortado internet.
Sé que tengo muchísimo por hacer, y me queda muy, muy poca vida por delante...

Quiero mi línea de indumentaria, remeras y estampados con mis diseños.
Quiero mi blog, en el cual escribir todos los días acerca de algo que me interese y me permita conectar con los demás.
Quiero mi página de marketing de afiliado, dominio y sitio Web.
Quiero mis cursos online que me generen ganancia pasiva.
Quiero mis libros traducidos todos los meses como hacía antes.
Quiero una página en la cual volcar y compartir conocimiento y contactos.
Quiero tener libros publicados. Quiero grabar audiolibros.
Quiero hacer un webcomic; quiero crear un mundo; quiero ganar dinero dibujando personajes.
Quiero convertirme en un hombre confiable; en un compañero en quien confiar; en alguien digno de respeto.

Y quiero más; siempre quiero más...

Quiero valer más que todos los demás que se creen más valiosos que yo,
y refregárselos en la cara.

Quiero reírme de los caretas, de los falsos, de los hipócritas
y de los attention whores.

Quiero que cada quien reciba el exacto castigo que merece,
ni más ni menos que eso.

Quiero que mi sombra se alimente de su energía natural y siga compitiendo,
alzándose contra todos los que pensaron alguna vez que de igual a igual, me pueden vencer (o peor aún, que me han vencido). Plantándole batalla en la cara a quienes se aprovecharon y abusaron de mí, sin cuartel, sin piedad, y sin segundos rounds.

Quiero todo eso. Y varias cosas más que no entraban en el post.
Pero quiero lograrlo con trabajo. Férreo, determinado, absoluto trabajo.

Así suene a delirio,
así suene pretencioso,
así suene arrogante, 
así soné toda mi vida.
 
Pero esta vez, no voy a detenerme a considerar si el resto lo aprueba o no.
 
 

 

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