Ir al contenido principal

Cómo Pensar Mejor

 

Ninguna habilidad es más valiosa ni más difícil de adquirir que la de pensar problemas de forma crítica.
 
Pensar mejor que los demás significa que vas a tener más tiempo libre y menos problemas. Si no podés pensar bien, vas a pasar un montón de tiempo enmendando errores evitables.
 
Si dejás de pensar cuando la mayoría de la gente deja de pensar, vas a llegar a las mismas conclusiones que la mayoría. Pensar es difícil, así que es natural que la mayoría de la gente deje de hacerlo apenas puede. Comprendemos la idea general de algo y nos movemos al siguiente problema.
 
 
Cómo podemos aprender a pensar mejor? Si bien la mayoría de los consejos se enfoca en observaciones superficiales, la verdadera mejora requiere la comprensión de cómo funciona el pensamiento mismo.
 
Una respuesta proviene de la conferencia Solitude and Leadership de William Deresiewicz, autor del bestseller Excellent Sheep: The Miseducation of the American Elite and the Way to a Meaningful Life. El discurso completo vale la pena, pero estos son los puntos esenciales.
 
 

Aprendiendo Cómo Pensar

 

Empecemos con cómo no aprendés a pensar. Un estudio de un equipo de investigadores de Stanford salió hace un par de meses. Los investigadores querían descubrir cómo los estudiantes universitarios de hoy eran capaces de llevar a cabo múltiples tareas más efectivamente que los adultos. Cómo lo hacen, se preguntaron los investigadores? 
 
La respuesta, descubrieron -y esto no es lo que esperaban- es que no lo hacen. 
 
Las capacidades cognitivas mejoradas que los investigadores esperaban encontrar, las facultades mentales que permiten a la gente llevar a cabo multi-tareas de forma efectiva, simplemente no estaban ahí. Dicho de otra forma, la gente no ejecuta multi-tareas de manera efectiva. 
 
Y he aquí el descubrimiento realmente sorprendente: cuanto más multi-tareas busca hacer la gente, peor lo hacen, no sólo en las demás habilidades mentales, sino en las multi-tareas en si mismas.
 
Una cosa que hizo al estudio diferente de los demás es que los investigadores no evaluaron las funciones cognitivas de la gente mientras estaban haciendo multi-tareas. Separaron el grupo de sujetos entre multi-tareístas altos y bajos y usaron un sistema de medidas diferente para medir el tipo de habilidades cognitivas relacionadas con la multi-tarea. Descubrieron que en cada oportunidad, los altos lograron un peor puntaje.
 
Eran peores en distinguir la información relevante de la irrelevante e ignorar esta última. Dicho de otra forma, eran más propensos a la distracción. Eran peores a lo que podría llamarse "clasificación mental": en mantener la información en las cajas conceptuales adecuadas y ser capaces de recobrarlas con rapidez. O sea que, sus mentes estaban más desorganizadas. Incluso obtuvieron peor puntaje en la característica que define a las multi-tareas: conmutar entre tareas.
 
Hacer multi-tareas, en síntesis, no solo no es pensar, sino que impide tu capacidad de pensar. Pensar significa concentrarse en una cosa el tiempo suficiente para desarrollar una idea al respecto. Esto no es aprender las ideas de otros, o memorizar un cuerpo de información, no importa cuán útil estas cosas puedan ser útiles. Desarrollar tus propias ideas. En resumen, pensar por tu propia cuenta. Simplemente no podés hacer eso en ráfagas de 20 segundos a la vez, siendo constantemente interrumpido por mensajes de Facebook o Twitter, o paveando con tu iPod, o mirando algo en Youtube.
 
He descubierto por mi propia cuenta que mi primer pensamiento jamás es mi mejor pensamiento. Mi primer pensamiento siempre proviene de alguien más; siempre es lo que oí al respecto, siempre es la sabiduría convencional. Es sólo a través de la concentración, de la insistencia en la pregunta, del ser paciente, del permitir a todas las partes de mi mente involucrarse, que arribo a una idea original. Al darle a mi mente la oportunidad de hacer asociaciones, de trazar conexiones, de sorprenderme. Y a menudo incluso esa idea no termina siendo muy buena. Necesito tiempo para pensar en ella, también, cometer errores y reconocerlos, hacer partidas falsas y corregirlas, durar más que mis impulsos, vencer mi deseo de declarar la labor finalizada y moverme a lo siguiente.
 
Solía tener estudiantes que se jactaban de cuán rápido escribían sus reportes. Les contaba acerca del gran novelista alemán Thomas Mann, que decía que un escritor es alguien para el cual escribir era más difícil que para las demás personas. Los mejores escritores escriben mucho más lento que los demás, y cuanto mejores se vuelven, más lento escriben. 
 
James Joyce escribió Ulysses, la gran novela del siglo 20, a un ritmo aproximado de 100palabras por día - la mitad del largo de la selección que les he leído antes del libro Heart of Darkness- durante siete años. 

T.S. Eliot, uno de los poetas más grandiosos que nuestro país ha producido, escribió unas 150 páginas de poesía durante el curso de su carrera completa de 25 años. Eso es media página al mes. 
 
Lo mismo pasa con cualquier otra forma de pensamiento. Lográs tu mejor pensamiento bajando la velocidad y concentrándote.
 
 

Mejorando el Pensamiento

 

La mejor forma de mejorar tu capacidad de pensar es pasar tiempo pensando.
Sumergirnos en una materia y darlo e todo nuestro esfuerzo atencional nos ofrece percepciones que no pueden obtenerse con sólo hojear la superficie.

 

Cómo podemos forzarnos a pasar más tiempo pensando?
Una forma de hacerlo es escribiendo sobre ello.
 
Si bien comprendemos naturalmente que escribir ayuda a compartir ideas con los demás, subestimamos cuánto esto afila nuestro propio pensamiento. Escribir no sólo es comunicación - es una herramienta para un razonamiento más profundo. En un mundo de atención fragmentada, escribir nos obliga a desacelerar y a pensar sistemáticamente.
 
Escribir es el proceso a través del cual nos damos cuenta que no comprendemos, y el proceso a través del cual alcanzamos la comprensión.
 
Escribir requiere comprimir una idea. Cuando se hace pobremente, la compresión reduce información crucial. Cuando se hace bien, la compresión retiene lo esencial, y remueve el resto. Esta combinación de pensamiento y claridad es lo que hace que escribir sea una herramienta tan poderosa para pensar.
 
La buena escritura le impide al pensamiento deficiente ocultarse en ningún lado. Leer es fácil, y fluye. La escritura pobre se arrastra mientras tu mente se aburre rastrillando a través de la ofuscación para encontrar significado. La escritura deficiente revela un pensamiento deficiente.
 
 

Conclusión

 

Escribir es pensamiento manifiesto. Expone las lagunas en el razonamiento que el pensamiento casual ignora y crea un registro permanente de percepciones que de otra forma desaparecerían. Si bien compartir la escritura con otros añade perspectiva valiosa, el verdadero poder reside en cómo nos fuerza a luchar con nuestras propias ideas hasta que se vuelven claras.
 
Empezá de a poco. Elegí una idea importante y explorala a través de la escritura. Tu pensamiento va a afilarse con cada palabra.
 
 

 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Gaiman [Parte IV, 15%]

   Nota: el siguiente texto es una traducción del artículo original íntegro, sobrecargado de descripciones que tienen la intención de manipular las emociones del lector por encima de presentar la información pertinente. El artículo deja de manifiesto las pretensiones literarias de quien lo escribió, sobrecargado de lirismos y devaneos en pos de ser considerado para algún tipo de premio literario feminista, pasando muy por arriba detalles cruciales en lo que a todo el asunto respecta, y buscando aligerar la responsabilidad de la "protagonista" de la historia y las actrices de reparto.   Es importante recordar también que al momento de salir esta nota, Neil Gaiman y Amanda Palmer siguen trenzados en un divorcio en proceso que lleva ya varios años. Téngase en cuenta el sesgo adoptado por quien escribió el artículo y estas circunstancias a la hora de sopesar la magnitud de lo ocurrido y el objetivo ulterior que tenga este terraplén de texto de minimizar o graciosamente...

Gaiman [Prólogo]

  Rompiendo el Silencio   Artículo original [ENG]: https://journal.neilgaiman.com/2025/01/breaking-silence.html?m=1     En los últimos muchos meses transcurridos, he observado las historias circulando en internet acerca de mí con horror y desaliento. Me he quedado callado hasta hoy, tanto por respeto a a la gente que estaba compartiendo sus historias como por la intención de no atraer más atención a un montón de desinformación. Siempre intenté ser una persona reservada, y sentí que con el correr del tiempo que las redes sociales eran el lugar equivocado para hablar acerca de asuntos personales importantes. He alcanzado un punto donde siento que debería decir algo.   Mientras hojeo esta última recolección de eventos, hay momentos que a medias reconozco y momentos que no, descripciones de cosas que ocurrieron sentadas al lado de cosas que categóricamente no ocurrieron. Estoy muy lejos de ser una persona perfecta, pero nunca establecí relaciones sexuales...

Gaiman [Parte IV, 25%]

  En The Sandman , la serie de cómics de DC que se publicó de 1989 a 1996 e hizo famoso a Gaiman, el cuenta una historia acerca de un escritor llamado Richard Madoc . Luego de que el primer libro de Madoc demuestra ser un éxito, se sienta a escribir el segundo y descubre que no se le ocurre ninguna buena idea. Esta dificultad desaparece luego de que acepta un obsequio inusual de un viejo escritor: una mujer desnuda,   única, a la cual mantuvo encerrada en un cuarto de su casa durante 60 años. Ella es Calíope , la más joven de las Nueve Musas. Madoc la viola, una y otra vez, y su carrera florece de la manera más extraordinaria. Una joven lectora le dice cuánto adoró su caracterización de una mujer fuerte, apurándolo a decir, "A decir verdad, me considero un escritor feminista." Su caída llega sólo cuando el héroe de la historia, Sandman , también conocido como el Príncipe de Historias, libera a Calíope de su cautiverio. Un ser de creatividad y carisma sin fronteras, Sandman ...